La belleza de la playa del Porto Giunco no se puede describir con palabras, es inútil. Incluso las imágenes solo pueden ayudar un poco a comprender el esplendor de este lugar, pero nunca podrán sustituir a la experiencia individual que se vive cuando estás allí.
El impacto a la llegada es algo único porque la playa está rodeada en parte por la gran laguna de Notteri. Incluso como un regalo, hay hermosos flamencos rosados. Su presencia completa la armonía del lugar, y permite mantener el delicado equilibrio entre el medio ambiente y la naturaleza que esperamos nunca se estropee.
La playa es kilometrica y se caracteriza por tener un cabo o promontorio y por la Torre de Giunco. La arena es blanca con tonos de granito rosa erosionado por el mar, y está bañada por las aguas turquesas y cristalinas. Los servicios de playa son muy variados. Hay varios chiringuitos que ofrecen servicio de bar y alquiler de sombrillas y tumbonas. Para llegar allí hay que ir desde Villasimius recorriendo la carretera hacia el Capo Carbonara. A la altura de la marina, a la izquierda hay una entrada hacia un camino de tierra que bordea la laguna Notteri y finaliza en un claro entre los árboles donde se puede aparcar el coche.
Las actividades que se pueden hacer realizar son muchísimas y se recomienda especialmente el buceo o snorkel en la zona (mirando hacia el mar) a la izquierda de la playa del Tanka Village, donde nadando a unos 50 metros mar adentro desde la orilla, hay un punto en el que se pueden ver divertidos peces ballesta. Estos peces no son nativos del lugar, sino que aparecieron hace algún tiempo en Villasimius, y parece que han encontrado un hábitat ideal para reproducirse y vivir. Aquellos que prefieran quedarse en la playa, puede tomar largos paseos por la orilla y luego, como suelo hacer yo, caminar con el agua a la altura de la cintura, para reactivar la circulación de la sangre. 🙂
Comentario del turista: Porto Giunco se mantiene bastante resguardado del viento, sobretodo del Mistral, pero en Cerdeña sabemos que a veces los aullidos del viento mistral hace que la estancia en la playa pueda llegar a ser problemática. En este caso, sugiero que busques refugio en el lado derecho de la playa, hacia el promontorio y la torre. En esa zona se pueden encontrar varias pequeñas calas donde ya no se oye el viento. La línea de agua sigue siendo baja durante un largo trecho (no cubre), y esto también permite que los niños jueguen con seguridad en la orilla del mar.
El aparcamiento de la playa no es de pago y es lo suficientemente amplio para dar cabida a un buen número de coches. A pesar de esto, sin embargo, durante el verano, especialmente en agosto, el hacinamiento es inevitable. Por ello aconsejamos evitar las horas punta. Una buena opción sería ir muy temprano por la mañana o directamente ir por la tarde a partir de las 17.30 horas; cuando la playa, desde esa hora en adelante empieza a vaciarse y se prepara para mostrar los colores de la puesta de sol desde la laguna, donde su reflejo en el mar crea un espectáculo de luz casi irreal.
Situación: Villasimius
Google Maps: https://www.google.es/maps/place/PortoGiunco
