La isla de Asinara es un lugar único en el Mediterráneo. Es una isla que te hace sentir una naturaleza totalmente salvaje y primitiva. La conexión con el mar, la tierra, y los animales que habitan la isla es una experiencia casi imposible de recrear en otro lugar.
Se trata de una isla grande, de 51km2, por lo que su visita hay que planificarla con antelación si se quiere ir por libre, dependiendo de lo que queramos hacer puesto que no hay carreteras, y caminar por ella no es fácil puesto que tampoco hay donde resguardarse de las inclemencias del tiempo. Otra opción es contratar una agencia con todo organizado donde podremos escoger que tipo de visita queremos realizar.
La isla de Asinara está situada a pocos quilómetros de tierra firme y de la localidad de Stintino, justo frente a la famosa playa de La Pelosa.
La isla fue habitada por algunas familias de pescadores provenientes de Liguria y se quedó durante décadas bajo el gobierno del Ducado de Asinara establecida por el rey Vittorio Emanuele I a favor del Marqués de Sassari Don Antonio Manca Amat.
En 1836 el territorio vuelve a estar de nuevo bajo el control directo del Estado y en 1885 las familias, unas 50, se vieron obligadas a salir de la isla que se transformó en una colonia agrícola y Lazaretto para aislar a los enfermos terminales y prevenir epidemias.
En 1997 se convierte en el Parque Nacional de Asinara y sólo desde 1999, cuando la prisión de maxima seguridad que hubo a posterirori dejó de funcionar, la isla fue abierta al público.
Debido a su aislmiento, la isla tiene un valor natural excepcional.
En Asinara, debido a que escasea el agua dulce, los árboles son raros y predomina vegetación arbustiva. Recomendamos sobretodo visitar la isla en primavera, cuando la vegetación está en todo su esplendor. Sólo hay tres playas de arena en toda la isla, las tres en la costa oriental.
La isla es el hogar de una población de asnos albinos salvajes, (Equus asinus var. albina) y se cree que la isla toma su nombre de ellos. También encontraremos otros animales como cabras, jabalí, muflones y sobretodo caballos salvajes que nos dejaran de lo mas sorprendidos al verlos correr y relinchar en manadas por detrás nuestro mientras estamos tomando el sol en una playa paradisiaca. Señores!! esto es algo indescriptible! Es una experiencia única que nos hace conectar con la naturaleza salvaje y hace que todo el esfuerzo por llegar a la isla merezca la pena.
Asinara está deshabitada actualmente, excepto por una persona, el escultor Enrico Mereu que reside en la isla desde hace 30 años. Enrico, ex-guardia de la antigua cárcel de la isla hasta que se retiró, decidió continuar residiendo en este lugar convirtiéndose en un escultor de mérito y al que todo el mundo llama «el escultor de Asinara». Enrico practica la escultura sobre los troncos arrancados por las tormentas y que puede encontrar en las playas de la isla. Su estudio se encuentra en la localidad de Cala d’Oliva al norte de la isla. tel. 340 6101578 – www.loscultoredellasinara.it
Sin duda Asinara merecerá varias entradas en nuestro blog, puesto que es un lugar muy especial y del que hay muchísimo para explicar y muchas actividades para realizar: senderismo, buceo, ciclismo, paseos en jeep, visita al centro de recuperación de tortugas de la isla, etc.. incluso simple snorkel en la superficie con una máscara, compensa todo: los peces son muchos y muy grandes. Fornelli y Cala Reale son los principales puntos de desembarque: Fornelli es la parte más cercana al continente y se encuentra en frente de Stintino, mientras que Cala Reale se encuentra en el centro de la isla y hay que llegar por ferry. Ya sea desde Fornelli a Cala Reale o viceversa, se puede optar por tomar un autobús de transporte interno, que va alrededor de la isla y es la puerta de entrada al norte y Cala d’Oliva.
Para aquellos que tienen interés en Cala d’Oliva hay un centro de buceo dirigido por unos chicos muy listos que organizan diversas excursiones e inmersiones en las zonas más bellas de la isla. Su sitio web es: http://www.caladolivadiving.com/
En la web oficial del parque se encuentran varias opciones para visitar la isla. Aquí facilitamos los enlaces para descargar los pdf en italiano:
En esta ocasión, vamos a relatar como fue nuestra experiencia, totalmente por nuestra cuenta, para ir a disfrutar de un día de playa.
Lo primero es conseguir transporte a la isla. Escogimos el Centro Nautico Isola d’Ercole que se encuentra en el Porticciolo Ancora Club (situado en la carretera que va del pueblo de Stintino a la playa de la Pelosa) a la derecha fente al mar. Es un puerto pequeñito con zona de parking.
Allí nos llevaron hasta Asinara en un bonito paseo con su lancha hasta el puerto de Fornelli (zona donde está situada la carcel) y después pasan a recogernos por la tarde. Nuestro «capitán» fue muy simpático y a la vuelta nos llevó a toda velocidad disfrutando de un final perfecto para nuestro día «salvaje».
MUY IMPORTANTE: Tenemos que llevar con nosotros todo lo que podamos necesitar: sombrilla, agua, comida, protección solar, medicamentos (sobretodo los alérgicos a las picadas de insectos y los asmáticos) etc, puesto que en la isla no hay NADA y dependeremos de nuestras propias provisiones.
Una vez se llega a Asinara, nos tomamos un café en el pequeño bar que hay junto al centro de visitantes, y a partir de ahí recorrimos la ruta más corta (de unos 20 min caminando) para llegar hasta un auténtico paraíso, una playa salvaje y solitaria donde disfrutar de un día especial.
Para coger este camino, hay que situarse mirando hacia el interior, donde está la antigua cárcel y hay que girar a la izquierda y seguir un pequeño camino de tierra pegado a la costa, y que mas o menos podemos ir siguiendo hasta una gran planicie que tendremos que cruzar.
En algún momento el camino desaparece pero es cuestión de seguir hacia el sur, siempre hacia la costa, manteniendo el mar a nuestra izquierda. El camino se puede hacer perfectamente con niños, porque no tiene ninguna dificultad, es todo plano, siempre y cuando se tenga en cuenta el calor, por lo tanto evitar las horas de máxima insolación.
La playa a la que nos dirigimos quedaría situada justo delante de la Pelosa, pero hay otra pequeña isla, denominada Isola Piana, que nos la tapa pero que nos hace descubrir otro torreón español que desde la Pelosa se nos había escapado 😉
Situación de esta playa: https://www.google.es/maps/Spiaggia Asinara
Dentro de sus aguas transparentes los amantes del snorkel encontrarán mucha vida marina. Así que no olvidar las gafas y el tubo para bucear.
Una vez allí, es muy importante plantar bien nuestra sombrilla para no sufrir una insolación y evitar que vuele si se levanta el viento, y disfrutar de un día de playa salvaje donde lo más seguro es que seamos las únicas personas en el lugar.
Comentario de la turista: Recordar empezar a volver de la playa con suficiente tiempo de antelación de la hora acordada para nuestra recogida por el barco, porque suelen aparecer algunos residentes que nos distraen en el camino…
Recordad que los animales de la isla son salvajes y que por lo tanto, es mejor no molestarlos, sobretodo a los caballos cuando están con sus crías. Los grupos son numerosos. Se dejan fotografiar de cerca, pero siempre mantener una distancia prudente. Las luchas entre caballos que pudimos ver fueron de lo más rápidas y agresivas.
Igualmente respetar a los cormoranes en las playas mientras están pescando. Si somos pacientes, siempre nos ofrecen un bonito espectáculo. Y por último, recoger cualquier cosa que hayamos traído con nosotros y aplicar las buenas prácticas ambientales en toda la isla.
A la hora de volver, mantener siempre el mar a la derecha:
Situación de la isla: https://www.google.es/maps/place/Asinara
Gracias por la información.!